Jung-Sook tiene 18 años recién cumplidos, está a punto de terminar el Instituto, y es la jefa de una pandilla de chicas llamada “Las Cinco Princesas”. Tanto ella como sus amigas intentan ser malas porque es lo que “mola” pero las pobres no lo acaban de conseguir del todo.
Hyuk-Joon tiene 28 años y trabaja como Fiscal. Es el primogénito de una familia adinerada y muy tradicional, y, aunque parece bastante estirado, en el fondo es un buenazo. Su gran sentido de la responsabilidad le pierde siempre y acaba con un quebradero de cabeza detrás de otro.
Los abuelos de Jung-Sook y Hyuk-Joon eran grandes amigos y decidieron concertar su matrimonio cuando Jung-Sook era sólo un bebé. Después de eso la familia de Jung-Sook se vio obligada a huir de Andong (el pueblo donde vivían las dos familias) y ocultarse en un suburbio de Seúl para esquivar a los acreedores.
Jung-Sook crece lejos de todo ese tradicionalismo y, aunque su madre le ha contado mil veces la historia de cómo se concertó su matrimonio, nunca se lo ha tomado en serio. A Hyuk-Joon también le han contado lo de su matrimonio, pero nunca ha creído que fuera a hacerse realidad ya que ni siquiera se sabe el paradero de su supuesta novia.
Sin que ninguno de ellos dos lo sepa, el abuelo de Hyuk-Joon se ha pasado todos esos años buscando a la nieta de su amigo y finalmente, ahora que Jung-Sook está a punto de cumplir 18 años, consigue localizarla.
¿Qué pasa cuando dos personas tan diferentes se ven obligadas a casarse?, ¿Pueden dos personas aceptar casarse con un auténtico desconocido de la noche a la mañana?, y, si lo hacen, ¿Es posible que lleguen a quererse de verdad algún día o se pasarán toda la vida simplemente soportándose?.