Cuando Aihara Ame era estudiante de secundaria en Nagasaki, no tenía confianza en sí misma debido a su pasado. Asano Taiyo era un estudiante que asistía a la misma escuela que Aihara Ame. Él fue la única persona que le habló alegremente. Con él pudo ver su vida de manera positiva por primera vez en su vida. Ella tenía sentimientos por él. Después de graduarse, fue a Tokio para cumplir su sueño de convertirse en pastelera sin contarle a Asano Taiyo sus sentimientos por él. Después de 8 años, regresa a Nagasaki. Un día conoce a Asano Taiyo, a quien nunca ha olvidado, y se alegra de volver a verlo. Pronto ocurre un accidente y Aihara Ame cae en una profunda desesperación. Un hombre aparece frente a ella y se presenta como un guía del más allá. Él le dice que si ella le entrega su corazón, él le hará un milagro.
