Ha pasado medio año desde que Enomoto Kei (Ohno Satoshi) desapareció. Los abogados Serizawa Gou (Sato Koichi) y Aoto Junko (Toda Erika), han vuelto a su trabajo diario. Entonces, un día, se encuentran a un presidente de una empresa de valores muerto a golpes dentro de su casa. Serizawa descubre el cuerpo junto con la sobrina de la víctima, Ikuko (Kuroki Hitomi). Todo gira en torno a una galería de arte y una colección artística, y la vuelta de Enomoto, que intentará descubrir, una vez más, qué hilos se mueven en nuevos casos relacionados con habitaciones cerradas...