Ishikawa Ango es un inteligente detective con un agudo poder de observación. Solo se enfoca en su trabajo y su vida personal es prácticamente inexistente. Un día, un expolicía es asesinado por un disparo, Ango se dirige a la escena del crimen, pero recibe un balazo en la cabeza por el criminal que aún se encontraba allí. Ango entre la vida y la muerte se pregunta, «¿adónde van las personas después de la muerte?» y luego un «no quiero morir» atraviesa su corazón. Milagrosamente Ango sobrevive, pero la bala aún se aloja en su cabeza. De vuelta en el trabajo, un nuevo caso de asesinato llama a la puerta. Argo, en la escena del crimen ve a un niño a punto de llorar, el problema es que solo él es capaz de hacerlo, ya que el niño es la víctima del asesinato.